Taiwán presentó su primer submarino de construcción nacional en un momento en que las tensiones y las amenazas de China crecen
Melissa Velásquez Loaiza
(CNN) — Taiwán presentó este jueves su primer submarino construido en el país, un logro que la líder de la democracia insular aclamó como un hito importante mientras Taipei trabaja para impulsar su disuasión militar ante una creciente amenaza de Beijing.
La presidenta Tsai Ing-wen presidió una ceremonia en el astillero del submarino en la ciudad sureña de Kaohsiung, donde el buque híbrido diesel-eléctrico fue nombrado oficialmente “Narwhal” en inglés y “Hai Kun” en mandarín, que puede traducirse libremente como “monstruo marino”.
“El submarino es una realización importante de nuestro compromiso concreto de defender nuestro país”, dijo Tsai. “También es un equipamiento importante para nuestras fuerzas navales en el desarrollo de estrategias de una guerra asimétrica”.
“En el pasado, mucha gente pensaba que construir un submarino autóctono sería una tarea imposible. Pero lo logramos”, añadió.
La ceremonia fue un momento personal significativo para Tsai, quien lanzó una política de defensa emblemática para construir el primer submarino nacional poco después de asumir el cargo en 2016.
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La presidenta de Taiwán pronuncia un discurso en la ceremonia de lanzamiento del primer submarino construido en Taiwán, en Kaohsiung el 28 de septiembre. (Crédito: Eric Cheung/CNN)
Los jefes de defensa taiwaneses esperan que los submarinos ayuden a hacer mucho más difícil una posible invasión de China, que reclama la isla como su territorio y ha intensificado su ruido de sables en los últimos años.
Periodistas realizaron un recorrido por el interior del astillero del submarino, pero no se les permitió tomar fotografías de cerca por razones de seguridad.
Los detalles sobre el tamaño o la capacidad del barco tampoco fueron revelados durante la ceremonia, a la que también asistió Sandra Oudkirk, embajadora de facto de Washington en Taiwán, así como representantes de las misiones japonesa y surcoreana en Taipei.
Tsai dijo que el proyecto submarino autóctono era “una máxima prioridad” de su administración.
Con la incorporación del “Narwhal”, Taiwán tendrá un total de tres submarinos para 2025; ya cuenta con dos submarinos de fabricación holandesa que se pusieron en servicio por primera vez en la década de 1980.
Taiwán ha dicho anteriormente que planea construir un total de ocho submarinos autóctonos.
Cuando se le preguntó sobre el nuevo submarino en una rueda de prensa mensual este jueves, el Ministerio de Defensa de China comparó el buque con “una mantis que intenta detener un carro”, invocando un modismo chino común.
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Defendiendo la primera cadena de islas
En una sesión informativa interna a la que asistió CNN la semana pasada, el almirante Huang Shu-kuang, asesor del Consejo de Seguridad Nacional de Taiwán y líder del proyecto submarino autóctono, dijo que la nueva flota desempeñará un papel clave para impedir que Beijing lleve a cabo un bloqueo naval de la isla.
Si bien el Estrecho de Taiwán puede ser demasiado poco profundo para que operen los submarinos, los buques podrían ser más útiles cuando se despliegan para atacar a los buques de guerra chinos en el canal Bashi, que separa Taiwán de Filipinas, y las aguas entre Taiwán y las islas más occidentales de Japón, dijo.
Debido a que el acceso de China al océano Pacífico está limitado por la primera cadena de islas –que incluye Japón, Taiwán y Filipinas– sus fuerzas navales necesitarían pasar por estos dos puntos estratégicos para obtener acceso al océano más amplio.
Docenas de oficiales navales en el astillero del submarino dan la bienvenida a la presidenta Tsai Ing-wen a la ceremonia de lanzamiento en Kaohsiung el 28 de septiembre de 2023. (Crédito: Eric Cheung/CNN)
Por lo tanto, dijo Huang , Taiwán puede ayudar a limitar la proyección de poder militar de China desplegando sus submarinos allí.
En caso de un conflicto militar, la Marina china “definitivamente querrá ingresar al área al este de Taiwán para rodearnos y limitar la capacidad de intervención de Estados Unidos”, dijo Huang en la sesión informativa.
“Debido a que los submarinos pueden operar en aguas profundas y son difíciles de detectar, tienen más posibilidades de acercarse a los portaaviones (chinos)” y lanzar ataques.
Esa evaluación fue compartida por Collin Koh, investigador principal de la Escuela de Estudios Internacionales S. Rajaratnam en Singapur, quien dijo que la nueva flota de submarinos ayudaría a Taiwán a construir una “capacidad de segundo ataque más creíble”.
“China se centra mucho en contrarrestar lo que considera una posible intervención militar estadounidense, y ha planeado un importante compromiso naval con Estados Unidos fuera de la primera cadena de islas, alrededor del mar de Filipinas”, dijo.
“Si los taiwaneses quieren contribuir a eso, entonces una forma de hacerlo es reprimir a la Armada del EPL dentro de la primera cadena de islas, no permitir que salga y ayudar a que la intervención militar estadounidense sea exitosa”, agregó.
El almirante Huang también dijo que los submarinos están diseñados con la capacidad de transportar torpedos MK-48 fabricados en Estados Unidos, que pueden usarse para apuntar a barcos de superficie.
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Un viaje desafiante
Taiwán ha enfatizado cada vez más una política de autosuficiencia en materia de defensa, lo que ha visto a la isla intensificar su desarrollo de armas internas para modernizar sus fuerzas armadas y depender menos de las adquisiciones en el extranjero.
Tsai asumió el cargo en un momento en que Taiwán había estado luchando por persuadir a Estados Unidos y las naciones europeas para que vendieran a la isla artículos de hardware militar caros.
Eso se ha vuelto un problema menor en los últimos años a medida que Beijing aumenta la presión diplomática, económica y militar sobre Taipei y Estados Unidos en particular ha aprobado una serie de grandes ventas militares bajo el presidente Joe Biden y su predecesor Donald Trump.
Pero el programa de adquisición militar local de Taiwán sigue siendo un eje de su estrategia de defensa, particularmente cuando se trata de sistemas como misiles antibuque que podrían defenderse contra una posible invasión.
Un vídeo que muestra la construcción y las pruebas del submarino se muestra durante la ceremonia de lanzamiento en Kaohsiung el 28 de septiembre. (Crédito: Eric Cheung/CNN)
En marzo, CNN visitó una instalación estatal taiwanesa desarrolladora de armas militares, a propósito de la presentación de cinco nuevos tipos de drones militares autóctonos que son capaces de vigilar y lanzar ataques aéreos.
El éxito de Taiwán en la construcción de su primer submarino podría ayudar a aliviar algunas preocupaciones sobre su preparación militar a medida que Beijing afirma cada vez más sus reclamos territoriales sobre la democracia isleña de 23,5 millones de habitantes.
El gobernante Partido Comunista de China considera a Taiwán como parte de su territorio, a pesar de nunca haberlo controlado. Beijing ha prometido durante mucho tiempo que la isla debe ser “unificada” con el continente chino, por la fuerza si es necesario, mientras que las autoridades taiwanesas rechazan enérgicamente los reclamos territoriales de China sobre ella.
Beijing ha aumentado la presión sobre Taiwán bajo el gobierno de Xi Jinping, el líder más asertivo de China en una generación.
En los últimos años, aviones de combate, bombarderos y aviones de vigilancia chinos han realizado un número cada vez mayor de incursiones alrededor de la isla, mientras que buques de guerra chinos han cruzado la Línea Media no oficial que recorre el Estrecho de Taiwán con una frecuencia cada vez mayor.
El verano pasado, el ejército chino lanzó ejercicios masivos para protestar por la visita a Taiwán de la entonces presidenta de la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi.
Taiwán presentó su primer submarino construido en el país, el ‘Narwhal’, en un astillero de Kaohsiung. (Crédito: Eric Cheung/CNN)
En la sesión informativa interna, el almirante Huang dijo que Taiwán intentó por primera vez construir una nueva flota de submarinos cuando el expresidente Lee Teng-hui fundó un grupo de trabajo en 1995, pero enfrentó dificultades ya que Estados Unidos se mostró reacio a vender sus submarinos a la isla.
El proyecto comenzó formalmente en 2016, después de que Tsai asumiera el cargo.
Dijo que el proceso de construcción del primer submarino de Taiwán había sido muy desafiante debido a las limitaciones presupuestarias, los retrasos resultantes de la escasez mundial de chips y las preocupaciones sobre un posible espionaje chino.
El proyecto involucró a un total de 1.003 taiwaneses, la mayoría de las cuales participaron en el diseño del plano del submarino, dijo Huang. Todo el personal estaba sujeto a la vigilancia de una división de seguridad militar para garantizar que no se filtrara ningún secreto.
Huang dijo que le dieron un presupuesto de US$ 1.540 millones (49.360 millones de dólares NT) para construir el primer barco. Alrededor del 60% del presupuesto se gastó en la adquisición de materiales y equipos militares en el extranjero, pero creía que ese porcentaje disminuiría en el futuro a medida que la industria nacional de construcción de barcos submarinos de Taiwán madurara.
Se negó a revelar qué países aprobaron permisos de exportación para Taiwán, pero dijo que se había comunicado con altos líderes militares de la Flota del Pacífico de Estados Unidos, Japón, Corea del Sur e India.
Después de que se dio a conocer el submarino, entrará en pruebas en el mar el próximo mes antes de entrar en servicio el próximo año.
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