Decenas de estados demandan a Google por prácticas monopólicas en Play Store

Alexandra Ferguson

(CNN Business) — Decenas de estados presentaron una demanda antimonopolio contra Google que se centra en las prácticas de su tienda de aplicaciones.

La demanda sostiene que Google abusó de su dominio en el ecosistema móvil para favorecer su propia Google Play Store, reduciendo la competencia en el proceso. La demanda también apunta a las tarifas que Google cobra a los desarrolladores por las compras dentro de las aplicaciones.

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Bloomberg fue el primero en informar de la demanda.

Los registros judiciales revisados por CNN Business este miércoles mostraron que el caso contra Google se ha abierto en el Tribunal de Distrito de EE.UU. para el Distrito Norte de California. El Distrito de Columbia y 36 estados son nombrados como participantes, incluyendo Nueva York, California, Colorado, Utah, Massachusetts y otros.

Según la demanda del miércoles, Google tiene el monopolio de la distribución de aplicaciones para Android en Estados Unidos y ha utilizado contratos restrictivos para obligar a los fabricantes de dispositivos Android a promocionar la Google Play Store a costa de la competencia. (Acusaciones similares en Europa hicieron que Google anunciara en 2018 que dejaría de agrupar apps imprescindibles como Google Maps y Gmail con la Play Store).

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Parte del supuesto objetivo de Google era obstaculizar el aumento de las tiendas de aplicaciones de terceros. Según la demanda, Google hizo “un intento directo de pagar a Samsung para que abandonara las relaciones con los principales desarrolladores” para que la tienda de aplicaciones de Google siguiera siendo la fuente más atractiva de aplicaciones para Android.

La demanda también cuestiona las condiciones de los desarrolladores de Google que “hacen de Google Play Billing el único procesador de pagos dentro de la aplicación que un desarrollador de Android puede utilizar” cuando una aplicación vende contenido digital a través de una aplicación de Android.

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Esto es similar a las acusaciones dirigidas a Apple en el caso de Epic Games.

“Google está utilizando su posición dominante en el mercado para sofocar la competencia y extraer miles de millones de dólares en comisiones sobre las compras dentro de la aplicación de los consumidores desprevenidos, y este comportamiento anticompetitivo debe terminar”, dijo el fiscal general del Distrito de Columbia, Karl Racine, en un comunicado. “Google no solo ha actuado de forma ilegal para bloquear a los potenciales rivales de la competencia con su Google Play Store, sino que se ha beneficiado al encerrar indebidamente a los desarrolladores de aplicaciones y a los consumidores en su propio sistema de procesamiento de pagos y luego cobrar altas comisiones”.

Google respondió a la demanda en una entrada de su blog, diciendo que “es extraño que un grupo de fiscales generales estatales haya decidido presentar una demanda que ataca a un sistema que ofrece más apertura y opciones que otros”.

Las acusaciones suponen el más reciente dolor de cabeza legal para Google, que ya se enfrenta a múltiples demandas antimonopolio por parte del gobierno federal y los estados. También reflejan las crecientes críticas de los desarrolladores de aplicaciones y de los reguladores, que cada vez examinan más las tiendas de aplicaciones de Google y Apple en el ámbito de la tecnología móvil.

La noticia de la demanda ha sido recibida con cierta alegría. Por ejemplo, la Coalition for App Fairness, una organización sin ánimo de lucro del sector entre cuyos miembros se encuentran Spotify, Tile y Match Group, dijo que apoyaba la demanda.

“Las tiendas de aplicaciones han tenido vía libre para abusar de su posición dominante en el mercado durante demasiado tiempo”, dijo el grupo. “Sus políticas anticompetitivas ahogan la innovación, inhiben la libertad del consumidor, inflan los costos y limitan la comunicación transparente entre los desarrolladores y sus clientes”.

En la primavera boreal, Apple y Epic Games se enfrentaron en un juicio sin jurado sobre si Apple tiene un monopolio en la venta de aplicaciones para iOS y ha abusado de su poder contra los fabricantes de aplicaciones. Epic, el creador del videojuego en línea “Fortnite”, había tratado de eludir el sistema de pago dentro de la aplicación, propiedad de Apple, que permite al fabricante del iPhone tomar un 30% de los bienes y servicios digitales vendidos en iOS. Eso llevó a una disputa contractual que hizo que Apple retirara Fortnite de su tienda de aplicaciones, lo que finalmente condujo a la demanda de Epic, que podría trastocar el modelo de negocio de Apple.

Apple argumentó en el juicio que compite enérgicamente para distribuir aplicaciones de videojuegos, incluido Fortnite. Se espera una decisión sobre el caso en los próximos meses.

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