Renace en Brasil el equipo de fútbol de Mariúpol, disuelto por la guerra de Ucrania
Alejandra Ramos
(CNN) — Una pequeña parte de Ucrania renace en el sur de Brasil.
Hace poco más de un año, el club FC Mariúpol desapareció, a medida que la ciudad a la que representaba era azotada por la artillería y los bombarderos rusos.
El 19 de marzo de 2022, el equipo debía recibir al FC Kollos en el estadio Volodymyr Boyko para disputar un partido de la primera división de Ucrania. Pero para entonces su centro de entrenamiento había sido bombardeado; el campus del club se había convertido en un cuartel ruso.
Cuando se reanudó la liga profesional ucraniana, el FC Mariúpol no figuraba en el calendario, su plantilla se había disuelto y su estadio, con capacidad para 12.000 espectadores, estaba desierto.
Pero no se abandonó la esperanza.
El vicepresidente del club, Andriy Sanin, declaró este martes a CNN: “Cuando no jugamos, la gente se olvida de nosotros. Y esto nos inquietaba mucho. Empezamos a buscar ideas para que la gente siguiera hablando de nosotros”.
Una idea estaba a medio mundo de distancia.
“El primer país que te viene a la cabeza cuando piensas en fútbol es, por supuesto, Brasil. Encontramos una provincia entera que tiene casi un 80% de ucranianos étnicos, y encontramos un club de fútbol”, dijo Sanin.
La provincia, o región, es Prudentópolis, en el sur de Brasil, donde un gran número de habitantes son de ascendencia ucraniana. La ciudad de Guarapuava cuenta con la mayor comunidad ucraniana de Sudamérica. El 75% de sus 52.000 habitantes afirma tener ascendencia ucraniana.
Sergiy Yavorsky de Mariúpol celebra con sus compañeros de equipo después de anotar contra Djurgardens IF en la segunda ronda de clasificación de la UEFA Europa League en 2018. Christine Olsson/TT News Agency/Reuters
¿Y el club de fútbol? Associação Atlética Batel.
No es precisamente una potencia del fútbol brasileño, ya que el equipo juega en la tercera división de la liga estatal de Paraná. Pero, de repente, el Batel cuenta con seguidores internacionales. Durante los próximos seis partidos, y posiblemente por más tiempo, cambiará su nombre por el de FC Mariúpol, y adoptará las camisetas naranjas del equipo ucraniano, así como su escudo y su logotipo.
Para Sanin, “esto da esperanzas de que si el club no ha muerto, la ciudad tampoco morirá, y revivirá”.
“La Mariúpol ucraniana revivirá al igual que el club de fútbol ucraniano Mariúpol”, declaró a CNN.
En Brasil, el presidente del club Batel, Alex Lopes, declaró: “Nuestro club y nuestra región tienen mucho en común con el pueblo ucraniano. Nuestro objetivo es ayudar a mantener vivo el FC Mariúpol, que era el orgullo de la ciudad, hasta que pueda volver a funcionar”.
Un Putin desafiante visita la ciudad ocupada de Mariúpol, símbolo de la resistencia ucraniana
En el recién creado sitio web FCMariupolLives, Batel comentó: “Ucrania siempre ha abierto las puertas de Europa a los brasileños. Ahora es el momento de que Brasil acoja a los ucranianos y mantenga vivo al FC Mariúpol”.
Sanin afirma que es imposible expresar cuánto significa el gesto de Batel para el club ucraniano. Confiesa que un video creado en Prudentópolis para abrazar al FC Mariúpol le hizo llorar.
La página web creada por el club dice: “Cuidaremos del FC Mariúpol hasta que todos los ucranianos puedan volver a ir al estadio Volodymyr Boyko a ver jugar a su equipo de casa”.
El sentimiento es mutuo. Sanin declaró a CNN: “Realmente espero que más adelante, después de la guerra, nos reunamos definitivamente con los chicos del club brasileño. Les invitaremos a Mariúpol, al mar de Azov”.
Sanin, como millones de ucranianos, espera el tan anunciado lanzamiento de una contraofensiva ucraniana. Y es optimista en cuanto a que el estadio Volodymyr Boyko pronto volverá a ver en acción las camisetas naranjas.
“Hace unos días pedimos a la liga ucraniana que pospusiera nuestro regreso al fútbol grande una temporada más. Así que podremos volver en la temporada 2024/25”.
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